No hay verdades absolutas ni mentiras que oculten algo de cierto.No hay una acción sin por lo menos una pequeña reacción, al igual que nuestra energía hace que nuestro alrededor vibre afectando nuestro entorno mas inmediato.Es difícil atraer el amor cuando dentro de nosotros solo hay soledad palpitante y es muy difícil respirar en otro ambiente que no sea un aire con oxigeno.
Me fui de mi querido Madrid.Deje mi apartamento y aprendí lo que significa el verdadero desapego y en lo mas profundo no quería separarme de aquellas paredes que me habían visto crecer,llorar y reír.Mis amores pasaron por allí y el desamor se convirtió en mi compañero de piso dandome treguas con sus idas y sus venidas.
Me puse a llorar,no había otro remedio.Soy sabedor que la emoción contenida se queda cristalizada y bloqueada.No podía actuar como si nada pasara.Sabia que la casa ardía y era necesario apagarla y dejar barridas sus cenizas.No estoy de luto.Me siento extrañamente aliviado.Como si ahora pudiera irme a cualquier sitio y empezar de nuevo.Se que tengo suerte.Suerte de tener un hogar del que un día huí a descubrir otros mundos.A veces me siento un navegante y otras veces la sirena que espera al marinero para quedarse su corazón.Solo queda esperar el sonido del siguiente barco...